
Comenzó el paro de colectivos de la UTA: ¿cuáles líneas no prestarán servicios?
Hoy, martes 6 de mayo de 2025, comenzó el paro nacional de colectivos convocado por la Unión Tranviarios Automotor (UTA), afectando a más de 300 líneas de transporte público en todo el país. Este paro, que se extenderá por 24 horas, es una medida de fuerza en busca de mejoras salariales para los choferes de colectivos, quienes han visto frustradas sus expectativas de aumento después de una serie de negociaciones infructuosas con las empresas y el gobierno.
El paro, anunciado la semana pasada y ratificado ayer luego de una larga jornada de negociación, ha dejado sin servicio a gran parte del sistema de transporte público en la región metropolitana de Buenos Aires (AMBA) y en otras provincias. Según informes, más de 9 millones de pasajeros diarios se ven afectados por esta medida, lo que ha generado un impacto significativo en la vida cotidiana de los ciudadanos.
Aunque el paro es generalizado, no todas las líneas de colectivos están paralizadas. Algunas empresas han decidido operar con el personal disponible, lo que permite que algunas rutas continúen prestando servicio con normalidad. Sin embargo, estas excepciones no suelen ser suficientes para mitigar el problema, ya que la mayoría de las líneas están bajo la órbita directa de la UTA y han decidido unirse a la medida de fuerza.
El secretario gremial de la UTA, Gabriel Gusso, ha advertido que si no se cumple el reclamo salarial, el paro podría extenderse por tiempo indeterminado. Gusso también ha dejado abierta la posibilidad de que el gremio de metrodelegados, que también pertenece a la UTA, pueda interrumpir el servicio del subte en respaldo al reclamo salarial. Esta amenaza ha generado una atmósfera de incertidumbre en el sector del transporte público, ya que cualquier sorpresa en este sentido podría agravar aún más la situación.
En el marco de este conflicto, se destaca la tensión entre los gremios, las cámaras empresarias y el gobierno en torno al financiamiento del sistema de transporte. La falta de acuerdo en las negociaciones ha llevado a que el gremio quedara habilitado legalmente para avanzar con el paro, lo que ha dejado sin alternativas a las partes involucradas. La situación actual refleja una vez más la complejidad y la fragilidad del sistema de transporte público en Argentina, donde las demandas salariales y las necesidades de financiamiento se enfrentan en un escenario de tensión permanente.
Mientras tanto, los ciudadanos se ven obligados a adaptarse a las nuevas circunstancias, buscando alternativas para sus desplazamientos diarios. La espera por un acuerdo que resuelva el conflicto y permita la normalización del servicio de colectivos es un tema que preocupa a todos, ya que el transporte público es esencial para la vida cotidiana en las grandes ciudades argentinas. La situación actual es un recordatorio de la importancia de encontrar soluciones duraderas a los problemas estructurales que afectan el sector del transporte público en el país.