
En un esfuerzo conjunto por proteger a la población de la infección del virus de la influenza, la provincia de Buenos Aires ha concluido con éxito su campaña de vacunación antigripal. Este programa, diseñado para reducir las complicaciones, hospitalizaciones, secuelas y muertes causadas por la gripe, ha sido un éxito rotundo en su implementación.
La campaña, que se inició con el objetivo de alcanzar coberturas mayores o iguales al 95% en cada grupo de la población en riesgo, ha logrado una notable participación de la comunidad. Los puntos de vacunación, distribuidos en 34 hospitales, 49 Centros de Salud y Acción Comunitaria (CeSACs) y 4 centros extrahospitalarios, han sido fundamentales en la estrategia de vacunación.
Entre los grupos priorizados se encuentran los menores de 3 años, especialmente aquellos de 6 a 24 meses y de 2 a 3 años con factores de riesgo. También están incluidos los mayores de 65 años y las personas embarazadas en todos los trimestres, así como las puérperas hasta 10 días posparto. Estos grupos son considerados de alto riesgo y recibieron la vacuna de manera gratuita en los puntos de vacunación disponibles.
La vacunación antigripal es una medida crucial para prevenir complicaciones y garantizar la salud de la población. Según la Guía Rápida de Vacunación Antigripal 2025, la vacuna debe ser aplicada oportunamente, idealmente antes del comienzo del invierno, cuando la circulación del virus influenza es mayor. Aunque la campaña ha concluido, es importante que las personas que aún no se han vacunado haganlo lo antes posible para mantener la protección durante el invierno.
La doctora Cecilia Ezcurra, Jefa de Servicio de Infectología del Hospital Alemán y miembro de la Sociedad Argentina de Infectología, destacó la importancia de la vacunación: «Vacunarse solo toma unos minutos, pero el impacto es duradero, tanto para usted como para quienes le rodean».