Plan de Contingencia: La Provincia refuerza el servicio eléctrico en seis puntos críticos del interior bonaerense
Con el objetivo de garantizar la estabilidad del suministro eléctrico durante los meses de mayor demanda, el gobierno provincial ha puesto en marcha una estrategia integral de reforzamiento de la red en zonas estratégicas del interior de Buenos Aires. La iniciativa busca evitar los colapsos que históricamente han afectado a comunidades del interior durante los picos de consumo estival, implementando soluciones concretas que inyecten potencia adicional en puntos neurálgicos del sistema de distribución.
El plan se concentra en seis localidades identificadas como críticas por su vulnerabilidad ante aumentos súbitos de demanda: Carmen de Areco, 25 de Mayo, 9 de Julio, Pergamino, General Viamonte y Mar del Tuyú. Cada una de estas zonas recibirá unidades generadoras temporales que aportarán entre 2 y 5,7 megavatios de potencia adicional, permitiendo que el sistema local pueda absorber picos de consumo sin comprometer la continuidad del servicio. Esta distribución estratégica responde a un análisis detallado de los puntos donde históricamente se han registrado las mayores vulnerabilidades.
La inversión en infraestructura temporal representa una medida pragmática ante la urgencia de resolver problemas de abastecimiento que se intensifican con la llegada del verano. Pergamino, por ejemplo, contará con 5,7 megavatios de potencia adicional, mientras que Carmen de Areco recibirá 4 megavatios que beneficiarán también a localidades vecinas como Arrecifes, Capitán Sarmiento y San Antonio de Areco. Esta capacidad se suma a la infraestructura existente, creando un colchón de seguridad que previene los apagones que en años anteriores dejaron a decenas de miles de personas sin luz durante horas.
La implementación de estas medidas temporales forma parte de una estrategia más amplia del gobierno nacional y provincial para modernizar el sistema eléctrico argentino. Aunque estas soluciones paliativas son necesarias a corto plazo, están acompañadas por proyectos de mayor envergadura que buscan fortalecer permanentemente la infraestructura de transmisión. El gobierno nacional ha anunciado una inversión de 6.600 millones de dólares en obras de transmisión eléctrica que sumarán 5.610 kilómetros de nuevas líneas de alta tensión en todo el país, representando un incremento del 38,3% sobre el esquema actual.
En definitiva, este plan de contingencia evidencia el compromiso de las autoridades por evitar los cortes masivos que han caracterizado a los últimos veranos, aunque también expone la urgencia de resolver problemas estructurales de largo plazo en el sector energético. La combinación de medidas inmediatas, como la instalación de generadores en puntos críticos, y proyectos de infraestructura de mayor escala, constituye una respuesta integral a una crisis que requiere soluciones tanto emergentes como permanentes para garantizar que los argentinos puedan disfrutar del verano sin temor a quedarse sin luz.