
Un colegio privado es condenado a pagar más de 6 millones de pesos a una exalumna víctima de bullying. La Justicia ratifica la responsabilidad del centro educativo.
La Cámara de Apelaciones en lo Civil y Comercial de Mar del Plata ha ratificado, en una resolución contundente, una millonaria indemnización que un colegio privado deberá pagar a una exalumna que fue víctima de incesante acoso escolar en el año 2017. El centro educativo identificado como Galileo Galilei deberá compensar a la joven con más de 6 millones de pesos por los daños y perjuicios ocasionados.
El fallo judicial se basa en pruebas sólidas que respaldaron los sistemáticos hostigamientos que la estudiante sufrió durante su cuarto año de secundaria. Insultos, empujones, discriminación y exclusión fueron algunos de los actos de agresión que enfrentó por parte de sus compañeros, hechos debidamente documentados en el proceso legal, que se extendió entre 2017 y 2019.
El colegio intentó evadir su responsabilidad, negando los hechos y minimizando la gravedad del acoso vivido por la joven. Sin embargo, la Justicia determinó que la entidad educativa debía tener conocimiento de las posibles consecuencias psicológicas y físicas del bullying.
La sentencia también consideró la opinión de expertos en neurología y psicología, quienes coincidieron en que el estrés causado por el acoso escolar podría haber desencadenado episodios de epilepsia en la víctima. En este caso, la joven desarrolló una epilepsia crónica e incurable debido al acoso.
La indemnización por daños y perjuicios alcanzó los $3.496.842,78, a la que se sumó un 10% adicional. La compañía de seguros, inicialmente exenta de responsabilidad, también deberá responder junto con el colegio demandado. En total, la institución deberá afrontar una suma que supera los $6.378.846.
Este fallo sienta un importante precedente en la lucha contra el bullying en el ámbito educativo, reafirmando la responsabilidad de las instituciones escolares tanto en el daño sufrido por la víctima como en el causado por otros alumnos durante la actividad escolar. A pesar de la compensación otorgada, la joven y su familia deberán enfrentar las secuelas emocionales y físicas derivadas del acoso escolar. Es fundamental que las instituciones educativas tomen medidas contundentes para prevenir y abordar el bullying, creando un entorno seguro y respetuoso para todos los estudiantes.