
Los trabajadores judiciales de la provincia de Buenos Aires levantan la voz en reclamo de una mejora salarial tras los recientes acuerdos alcanzados por el gobierno bonaerense con los gremios docentes y estatales. Si bien la administración de Axel Kicillof cerró paritarias con ambos sectores en los últimos días, desde la Asociación Judicial Bonaerense (AJB) denuncian que su poder adquisitivo continúa rezagado y exigen una recomposición urgente.
El malestar creció luego de que los docentes bonaerenses aceptaran una nueva oferta de incremento salarial del 5% en dos cuotas, un acuerdo que contempló también compromisos para mejorar las condiciones laborales y la reapertura de futuras negociaciones en octubre. Por su parte, los estatales englobados bajo la Ley 10.430 aceptaron una suba del 10% fraccionada en dos tramos, aunque las propias bases docentes consideraron la mejora “insuficiente frente a la inflación” actual.
En paralelo, el sector judicial recibió una propuesta del 9% para el primer trimestre del año, abonado en dos etapas: 7% en febrero y 2% en marzo, con el compromiso de monitoreo inflacionario y reapertura paritaria en abril. Sin embargo, desde la AJB subrayan que el atraso salarial es particularmente grave en las categorías más bajas del escalafón, motivo por el cual se convocó a una mesa técnica específica que sesionará a fines de marzo para abordar correcciones focalizadas.
El sindicato judicial también remarcó otros aspectos de la negociación: el adelantamiento del cobro de sueldos por los feriados de carnaval, el incremento del 66% en la ayuda escolar anual y una suba en los topes y montos de asignaciones familiares, cambios que también alcanzarán a jubilados y pensionados del sector. Pese a estos avances, los referentes gremiales mantienen la pulseada y señalan la necesidad de seguir ajustando los salarios en línea con la aceleración de precios registrada en los últimos meses.
El escenario, en definitiva, refleja la tensión y el desgaste de las paritarias en la provincia. Mientras el gobierno intenta administrar recursos y negociar con distintos sectores, los judiciales insisten en que la recuperación salarial aún está lejos de saldar la deuda con los empleados del fuero, y advierten que no cesarán en sus reclamos hasta ver una mejora real y palpable en sus bolsillos.