El gobierno de la provincia de Buenos Aires, liderado por Axel Kicillof, reabrió este martes la negociación paritaria con los gremios docentes y estatales bonaerenses, en un contexto económico complicado por la alta inflación y la caída del poder adquisitivo. Sin embargo, en esta primera reunión del segundo semestre, las autoridades provinciales decidieron no presentar una propuesta formal de incremento salarial, lo que llevó a que la discusión pase a un cuarto intermedio hasta el próximo viernes 8 de agosto.
Durante la jornada, funcionarios de los ministerios de Economía, Hacienda, Empleo Público, Trabajo y Educación recibieron a los representantes del Frente de Unidad Docente Bonaerense (FUDB), integrado por gremios como SUTEBA, FEB, AMET, Udocba y SADOP, quienes plantearon la urgencia de un aumento salarial para agosto acorde a la rapidez de la escalada inflacionaria. Según comunicaron fuentes gremiales, el Ejecutivo provincial «tomó nota» del pedido y se comprometió a evaluar una respuesta para el siguiente encuentro.
Uno de los puntos centrales de la negociación giró en torno a las dificultades económicas que enfrenta la provincia, situación que el gobierno de Kicillof atribuyó principalmente a los recortes de fondos implementados por la administración nacional, liderada por el presidente Javier Milei. El ministro de Gobierno, Carlos Bianco, expresó ante los delegados sindicales que la provincia “seguirá haciendo un gran esfuerzo para que los salarios no pierdan contra la inflación”, aunque remarcó las severas restricciones presupuestarias vigentes.
Cabe recordar que en mayo pasado se había alcanzado un acuerdo salarial del 10% a pagarse en dos tramos (6% en mayo y 4% en julio), progreso que fue considerado insuficiente por los sindicatos ante la persistente inflación y el deterioro del salario real. Los gremios demandan que la próxima oferta contemple no solo una actualización mensual sino también mecanismos de protección frente a posibles sobresaltos inflacionarios, así como la mejora de condiciones laborales y la reducción de la jornada laboral, tema que también se analizó en la mesa de diálogo.
La próxima cita entre el gobierno y los sindicatos será el viernes 8 de agosto, fecha en la que se espera que la administración bonaerense finalmente presente una oferta económica concreta para docentes y estatales. Mientras tanto, el clima en la negociación es de expectativa y tensión, a la espera de una propuesta que permita recomponer el poder adquisitivo y llevar certidumbre a miles de trabajadores públicos de la provincia de Buenos Aires.