
En un plenario en Lanús, la precandidata presidencial del PRO volvió a defender al policía de civil que mató a un ladrón en Moreno luego de ser asaltado. Insistió en que competirá con listas propias en el distrito bonaerense
En su primera aparición pública desde que lo eligió como precandidato a gobernador, Patricia Bullrich compartió esta tarde con Néstor Grindetti un plenario de dirigentes del PRO de la Tercera Sección Electoral bonaerense en Lanús, en el que la candidata presidencial ratificó su decisión de competir con su propia lista en los 135 distritos de la provincia de Buenos Aires y le contestó al ministro del Interior, Eduardo “Wado” de Pedro, quien la criticó por su defensa del policía de civil que mató a un ladrón luego de ser asaltado: “Yo no meto en la seguridad de la campaña. Siempre dije lo mismo y lo dije desde el caso Chocobar. Si no cuidamos a los que nos cuidan y los convertimos en personas que sólo tienen miedo frente a la acción que tienen que realizar, la ciudadanía se queda sin seguridad”.
En un salón de Lanús, y en medio de un clima de euforia, unos 100 dirigentes bonaerense llenaron de aplausos a Grindetti por su condición de precandidato bullrichista y, al igual que la postulante a la Presidencia, elogió a Cristian Ritondo, Joaquín de la Torre y Javier Iguacel, los otros aspirantes a la gobernación de ese sector: “Hablé con los tres, nos están acompañando, sus equipos se están integrando y estamos juntos porque compartimos valores”, dijo al relativizar las diferencias internas.
Bullrich llegó acompañada por Ricardo López Murphy y dirigentes de Republicanos Unidos como María Eugenia Talerico, mientras que Grindetti estuvo con Diego Kravetz, jefe de Gabinete lanusense y candidato a sucederlo en las próximas elecciones. En el lugar los esperaban referentes bullrichistas como Patricia Vázquez; Walter Queijeiro, precandidato del PRO a intendente de Quilmes, y Cristian Larsen, miembro del directorio de la TV Pública que responde a Hernán Lombardi, entre otros.
Tras las palabras de bienvenida de Kravetz, quien elogió a Grindetti y advirtió que “la provincia es el botín del kirchnerismo para su poder territorial”, López Murphy despertó los primeros aplausos cuando dijo que el próximo gobierno “va a reponer el orden y a darles oportunidades a todos los argentinos” y que buscará “recomponer una sociedad donde el trabajo sea el elemento organizador”.
Grindetti comenzó su intervención con una frase que arrancó ovaciones: “No soy importado. Soy bonaerense y un vecino más que dialoga con la gente de acá”. Fue evidente que estaba marcando diferencias con Diego Santilli, su rival del larretismo, a quien le achacan su condición de porteño.
“Aprendimos las cosas que no nos salieron”, afirmó el precandidato a gobernador en tono autocrítico al aludir al gobierno de Cambiemos, luego de lo cual propuso “transformar en serio la provincia” y planteó: “Hay que dar vuelta al Estado como una media y hacerlo eficiente”. Allí, por primera vez, la dirigencia presente empezó a corear con fuerza el estribillo “Néstor Grindetti gobernador”