
Gustavo Posse y Maximiliano Abad se enfrentan en una puja por la interna abierta del partido en la provincia de Buenos Aires.
En la previa del lanzamiento oficial del gobernador jujeño, Gerardo Morales, como candidato presidencial, las diferencias internas en la Unión Cívica Radical (UCR) de Buenos Aires se agudizan. La corriente radical liderada por Gustavo Posse presentó 25 mil firmas para realizar una interna abierta en la provincia, lo que ha profundizado las diferencias dentro del partido.
La acción de Posse ha fortalecido su alineamiento con el gobernador Morales, quien también es presidente del Comité nacional del partido. Esto ha provocado la reacción del espacio interno liderado por el presidente del Comité provincial, Maximiliano Abad. Ambos sectores se acusan mutuamente de ser funcionales a los principales candidatos del partido amarillo en la Provincia, incluso hablan de una UCR PRO.
Abad, quien fue uno de los principales armadores en la exitosa elección del ahora diputado nacional Facundo Manes en la interna de Juntos en 2021, ha descartado la posibilidad de llevar a cabo una interna abierta. La corriente que lidera Abad busca promover un esquema de funcionamiento reglado y potenciar las propuestas electorales de la UCR. No obstante, el sector de Posse considera que Abad no mueve el amperímetro electoral y que no es más que «una candidatura entreguista para volver a tener al radicalismo dormido».
El comité radical se encuentra dividido en dos, y las diferencias son profundas. En las últimas horas, la Corriente de Opinión Nacional de la UCR ha emitido un comunicado denunciando la intromisión de Mauricio Macri en el partido. Según expresaron los dirigentes cercanos a Morales, el expresidente lleva adelante «una ofensiva con el fin de que la UCR llegue debilitada a las PASO y a las elecciones».
En definitiva, la UCR de Buenos Aires enfrenta un momento de tensiones internas en medio del lanzamiento del candidato presidencial Gerardo Morales. La puja entre Gustavo Posse y Maximiliano Abad por la interna abierta en la provincia de Buenos Aires parece estar lejos de solucionarse, y las acusaciones mutuas continúan en aumento.