
La gira de Patricia Bullrich y Néstor Grindetti se cruza con la de Diego Santilli y Rodríguez Larreta en el Gran Buenos Aires, aumentando la tensión política en la campaña electoral.
La campaña electoral en el conurbano bonaerense está en pleno apogeo, y la tensión se hace palpable mientras dos figuras destacadas del PRO, Patricia Bullrich y Horacio Rodríguez Larreta, realizan recorridos por diferentes localidades. Cada precandidato parece concentrarse en su propio juego político, pero los cruces y disputas se hacen evidentes.
En la zona norte del Gran Buenos Aires, Larreta y su compañero de fórmula, Diego Santilli, iniciaron temprano su recorrida en Pilar. Posteriormente, se dirigieron a Tigre, donde se encontrarían con Segundo Cernadas.
Por otro lado, Patricia Bullrich y Néstor Grindetti estuvieron en Vicente López, junto a la única intendenta del PRO en el conurbano sin competir en las PASO, Soledad Martínez. En Caseros, Tres de Febrero, Bullrich y Grindetti se enfrentarán en una interna contra un intendente propio.
La tensión se intensifica día tras día, y algunos colaboradores cercanos a ambos bandos señalan que parece haber falta de coordinación, lo que ha llevado a situaciones de superposición y competencia. Sin embargo, las dos campañas siguen mostrando su entusiasmo, aunque se percibe que una es más optimista que la otra.
El exabrupto de Sergio Massa hacia Patricia Bullrich, destacando su pasado montonero y su presente liberal, ha generado una agenda de discusión en la campaña. La exministra de Seguridad ha respondido con contundentes críticas hacia el líder del Frente Renovador.
Las encuestas comienzan a mostrar un matiz más favorable para Bullrich, lo que ha impulsado a Massa a aprovechar esta situación y posicionarse en una eventual segunda vuelta contra ella.
Las estrategias de campaña entre Bullrich y Larreta son diferentes. Bullrich centraliza la campaña en torno a su figura, mientras que Larreta cuenta con candidatos distritales y provinciales con una fuerte presencia territorial.
La provincia de Buenos Aires es un terreno clave para el desarrollo de las elecciones, y las internas en diferentes distritos definen la dinámica política del conurbano. La tensión y la competencia por el liderazgo en el PRO marcan el rumbo de una campaña electoral que se presenta reñida y llena de desafíos para ambos bandos.